La vida no te debe nada

Muchas veces pensamos que la vida nos debe cosas, pero si nos pensamos a pensar en todo cuanto hemos vivido, lo cierto es que tenemos mucho que agradecer a la vida. Hay que agradecer tanto lo que la vida nos da, como lo que nos quita, el amor y el dolor… porque son esas experiencias las que nos hacen fuertes y valientes para enfrentar nuevos desafíos.

Cuando pasa el tiempo y miras atrás recordando lo llorado y lo reído, te das cuenta de que la vida no es tan en blanco y negro como creímos en su momento, sino que por cada lágrima derramada, siempre habrá alguien que acabe logrando sacarnos una sonrisa. Y es que, amigas lectoras, la vida está hecha de momentos; hay que caminar por ella y ver lo que nos va deparando díaÂ trasÂ día.

En esta vida siempre tendremos dudas respecto a si hemos hecho bien o mal ciertas cosas, pero sólo viviendo el día a día te acabas dando cuenta que todo ha valido la pena, tanto los tiempos felices y fáciles, como los tiempos tristes, estresantes y dolorosos. A veces debiéramos simplemente dejar que la vida nos sorprenda, dejando que todo fluya.

Dios, en su infinita misericordia nos hace regalos que no sabemos apreciar, porque damosÂ porÂ hecho que merecemos todo lo que vivimos y tenemos, que es lo natural, que es así como debe ser… pero nada más lejos de la verdad: Si tenemos metas y sueños, tenemos que trabajar por lograrlos, a veces incluso sacrificar mucho por tenerlos. Nunca debemos dejar de ser buenos y solidarios con los que nos rodean, para que lo sean también con nosotros. Busquemos igualmente estar con las personas que alimentan nuestras vidas, personas positivas; y alejémonos de quien nos perturba y deja intranquilas.

Vive la vida sin hacer tantas preguntas, vive a tope tu felicidad, porque inevitablemente también habrán momentos de dolor y pena, la vida es así… así que disfruta lo que tienes, agradece lo que vives, sé feliz sin desear lo que está fuera de tu alcance.

Tienes mucho que puedes disfrutar y agradecer, mira también lo que tienes afuera de ti, un bello paisaje, una bella ciudad… si miras como se debe, verás cosas que te paralizan de tan hermosas que son. Muchas veces con sólo respirar frente a lo que tienes, se te van las penas, las nostalgias y hasta tus enfermedades, porque tú controlas tu mente.

¿Es mala la vida?

De ninguna manera, Â laÂ cuestiónÂ que a vecesÂ Â pensamos mucho y hacemos muy poco; nos quedamosÂ impávidosÂ ante situaciones y dificultades que la vida nos presenta. Haz lo que tienes ganas de hacer, no pienses tanto, ve y busca tu felicidad, ve tras tus metas y sueños. La vida esÂ efímera, hoy estamos y mañana no lo sabemos, es hora de que te plantees si quieres agradarles a los demás o a ti misma, pero habiendo aprendido que nunca es posible tener contentos a todos, y que sin embargo, muchas personas te van a querer, y por el mismo motivo otrasÂ teÂ odiarán. Así que, échaleÂ ganas,Â sí no te saben valorar, pierden ellos, tanto los amigos como la familia. Tú ponte guapa y sigue haciendo el bien que es lo más importante, ¿el resto? Pues que se aguanten, que tú eres especial.