¿Con quién relacionarte? ¿Con quién estar? ¿Y con quién no? ¿Qué personas te hacen bien y te inspiran a ser una mejor persona? Según las personas que tengamos en nuestras vidas, nuestra probabilidad de ser felices cambia drásticamente. Escoge bien, busca y acércate a lo que te hace ser mejor persona.
Lo que te hace bien y lo que no
Muchas veces para salir adelante y por nuestro propio bien, tenemos que dejar atrás a ciertas personas, desprendernos de ellos: son personas que te lo quitan todo, hasta las ganas de respirar, son cansinas, agotadoras, y por más que les dediques, nunca es suficiente. Por eso, a estas alturas de la vida, tienes que escoger quiénes merecen que estés a su lado y a quien dejar por el camino. Por tu salud y por tu felicidad, tienes que seguir adelante sin ellos.
Siempre pienso que no hay nada mejor que estar rodeada de personas positivas, conciliadoras, personas que aportan a tu vida y te inspiran a ser alguien más y a no quedar a mitad de camino en todo. Pero demasiadas veces nos rodean personas que sin verlo ni quererlo, te absorben hasta que dejas de ser tú, para ser lo que ellos quieren por lo que acabas viviendo con demasiado estrés y ansiedad, contagiándote por lo que ellos dicen.
Acércate a quienes te hacen ser mejor persona:
1. En la amistad:
Los amigos son las personas con las que, comúnmente, pasamos más tiempo. Influyen en nuestros gustos, opiniones, valores, proyectos, propósitos, ánimo y mucho más. Ya sea porque les ves con frecuencia, o hablas con ellos por teléfono, están siempre presentes en nuestras vidas. Y a veces, esa influencia no es positiva.
Hay amigos que nunca parecen tener suficiente, amigos que siempre tienen problemas y necesitan de ti para ayudarles. Pero que nunca se ayudan a sí mismos, y así, te tiras toda la vida desgastándote por ellos sin que se note nada, porque no cambian, siempre están igual, con los mismos problemas, lamentos y lloriqueos. Si los amigos no te hacen bien, aléjate de ellos. Pero a los que hacen bien, tenlos cerca, cuídales, mímales, y pasa tiempo con ellos.
2- En el amor
Cuando somos jóvenes, cualquier palabra nos endulza el oído, pero con el tiempo te das cuenta que no es suficiente, que necesitamos más hechos que palabras, más riesgos que tan pasivos. Cuando no demuestran con hechos su amor, cuando se vuelven pasivos y sólo hablan palabras bonitas, lentamente te acaba matando por dentro: hay que buscar gente que mueva tu mundo, que tenga pasión y no tema lanzarse contigo hasta el final. No aceptes amores a medias, recuerda que nada y nadie debería robarte esa luz que tienes dentro, así que si en algún momento sientes cansancio y no estás a gusto o feliz, sal de allí, y vuelve a construir otro mundo, con otras personas, que por suerte siempre las hay.
3. La Familia.
Tener una buena familia es una gran suerte, como padres comprensivos, de esos que siempre están para ti, aunque sólo sea para abrazarles. El sólo hecho de poder contar con ellos, te dará fuerzas y madurez en tus planes futuros.
Pero la otra cara de la familia, es no poder contar con ninguno de ellos, y desgraciadamente, esto es más frecuente que tener unos buenos padres y mejores hermanos. Ya cuando somos mayores notamos su lejanía, siempre con reglas, siempre con excusas, hasta que un día te cansas y ya no tienes ganas de verles, por la sencilla razón que no puedes contar con ninguno.
Y la vida familiar se vuelve indiferente y triste, porque con tu familia jamás puedes ser tú misma, y se va creando una barrera invisible que cuando más tiempo pase, más difícil es volver a verles, y optamos por separarles de nuestras vidas, pues nos hacen mal.
Y para tomar en cuenta:
Nada es perfecto en la vida y mucho menos nuestras vidas; quien te diga lo contrario se equivoca. No hay amores perfectos, ni familias perfectas, sólo nos queda respetar y esperar lo mismo. Nuestro objetivo debiera ser inspirar a otras personas, ser cada día mejores, y tratar de que la felicidad no sea una palabra que se use tanto que parezca algo inalcanzable.
Toda persona merece tener en este mundo algo o alguien que te alegre el corazón, unas sonrisas que siempre son buenas en la vida, y ojalá poder conocer personas que te inspiren a quererlo todo, y no a conformarte con las migas que otros ofrecen.
Estás aquí y ahora, necesitas felicidad, te mereces más ilusiones, no días en blanco y negro; busca los colores que da esa chispa que tan bien nos hace.
© Autor: Shoshan.