No estás sola, Dios está contigo

A veces parece que lo tenemos todo en contra, sentimos soledad, abandono y desesperanza. Pero aunque todos nos fallen, Dios siempre estará aquí para ayudarnos.

No estás sola, en tu vida aún hay personas que aunque estén lejos, piensan en ti y te llevan en sus pensamientos. Tienes también, el amor de Dios, quien como Padre Bueno que es, sigue tus pasos. Así que dime:

¿Qué te aqueja?, ¿por qué ya no sonríes?

No permitas que las tristezas te dominen, porque la vida es efímera,  el mundo gira tan rápido que el tiempo se va como la arena entre los dedos. Mejor toma las riendas de tu vida y permite que tus ojos emitan ese dulce destello que dejan esperanza e ilusión.

Los problemas van y vienen, eso es algo inevitable: lo único que puedes hacer es luchar por evitar que lleguen a tu vida, o para que estés prevenida cuando lleguen… Mientras tanto, vive de manera tranquila, llena de esperanza, pues viviendo así podremos mantenernos en pie.

Dios también nos ayudará, pues en su gran amor también guía y protege nuestro caminar, nos ilumina con el sol, nos abraza con la suave brisa, y con su amor que nos llena de paz y esperanza.

¿Por qué sentirte sola? Si con tan sólo cerrar los ojos Dios te envuelve en su amor infinito y te toma con dulzura entre sus brazos cuando sabe que ya no puedes más. Tienes que ser feliz, luchar por ser feliz, ser como las aves y volar suavemente por entre las nubes, planear con las alas abiertas y suavemente bajar a la tierra, ¡libre como el viento!, libre de tus decisiones, de tu vida, de amar y dar lo mejor de ti a quien tú quieras.

Recuerda, ¡no estás sola!, porque Nuestro Padre camina a tu lado y te susurra suavemente lo inmenso de su amor.

© Autor: Shoshan