Me encanta la Navidad, es un tiempo en el que estamos especialmente concienciados de amar y hacer el bien. Haz algo bello por alguien, sonríe, regala, anima a quien necesite apoyo… e intenta ser mejor persona. ¡Feliz Navidad!
¡Me encanta la Navidad!
Así es, me encanta esta época del año, adoro la Navidad. La ciudad en la que vivo actualmente es fría en diciembre, así que se presta para completar el paisaje de las películas de temporada. Nos falta la nieve, pero el resto está intacto, luces, gigantes árboles decorados, balcones con guirnaldas de estampidos navideños, villancicos… En fin, me encanta.
No a todos les gusta la Navidad:
Sé que la Navidad no representa lo mismo para todo el mundo; muchas personas lo ven como solo un día más, o incluso, un argumento capitalista para vender y aprovechar aumentos de precios. Pero por supuesto que la Navidad no consiste en eso. En todo caso, quizás, eso es lo que nos han querido hacer creer los más poderosos líderes de la sociedad del consumo.
¿Qué es la Navidad?
Veo la Navidad como el nacimiento de una conciencia profunda inmortalizada en el nacimiento de Jesús. Cada año, al celebrarla, deberíamos tener más presente la idea de que estamos asistiendo a un aniversario de nuestro propio nacimiento como personas plenas, con valores, conciencia, capacidad de reconocer los errores, descubrir los miedos, motivarnos y emprender nuevos sueños.
Disfrutemos como niños de la Navidad:
La Navidad debería volver a producirnos las emociones que nos trajo en la infancia. Ilusionados, incluso escribíamos cartas a Santa Claus o los Reyes Magos… Y si ahora te dijeran que escribas tu carta, ¿qué le pedirías?, ¿qué le agradecerías…? ¿Serías capaz de dar gratitud por esas calcetas que te trajo cuando pediste una bicicleta?
En Navidad buscamos ser mejores personas:
Aunque muchos no lo noten, la época navideña entra en el inconsciente y obra milagros. No digo que de la noche a la mañana el malo se vuelve bueno, pero sí que cada vez tenemos mayor anhelo humano por mejorar, por crear paz, y de estar en armonía los unos con los otros. Año tras año en estas fechas, gentes en todo el mundo lee, medita, hace ejercicio, planta una plantita, levanta la basura de la calle, rescata animales, lleva comida a los necesitados, adopta niños, abraza a sus abuelos, sonríe y da las gracias… eso es Navidad, el nacimiento de una conciencia de amor.
¿Por qué amor y bondad en Navidad y no todo el año?
Puede que te preguntes el motivo por el cual dejamos para diciembre estos actos de amor que podríamos tener todo el resto del año. Creo que todos nos lo preguntamos, y a la vez la respuesta es bien simple: porque somos humanos, seres imperfectos que aún estamos en proceso de transformación. Ojalá tengamos esa bondad todo el año, pero una fecha señalada que nos recuerde la importancia de hacerlo nunca viene nada mal.
Esta Navidad, sonríe y haz algo bueno:
¿Te animarías a hacer algo diferente en esta Navidad? ¿Abrazar a tu suegra y olvidar los malentendidos? ¿Aceptar las disculpas de tu cuñada? ¿Sonreírle a la pareja de tu ex? ¿Regalarte momentos de armonía? Estaría bien, hazlo.
Copyright © autor: Chuchi gonzalez
De mis padres aprendí: «Compartir lo poco o mucho que se tenga con una persona necesitada; allí radica la NAVIDAD»…