El “te lo dije” no sirve para nada positivo, sólo mortifica a quien lo recibe y aminora su autoestima, alegría y confianza.
Tengamos cuidado con nuestras palabras, y aunque tengamos razón, por lo general el “te lo dije” es mejor no decirlo.
El “te lo dije” no sirve para nada positivo, sólo mortifica a quien lo recibe y aminora su autoestima, alegría y confianza.
Tengamos cuidado con nuestras palabras, y aunque tengamos razón, por lo general el “te lo dije” es mejor no decirlo.
Hoy día prácticamente todos nos relacionamos por Internet.
Realizamos nuevas amistades, fortalecemos amistades, nos mantenemos al día de como están nuestros familiares…
Y en algunos casos, incluso el amor encuentra camino en internet. Es cierto que hay que tomar precauciones extra a la hora de enamorarse, pero es una opción viable. El amor también está en internet.
¡He descubierto que puedo estar orgullosa de mí misma!
He cometido muchos errores a lo largo de mi vida, he vivido situaciones terribles y llorado mares…
Pero todo ello no ha sido en vano, he aprendido de mis experiencias y gracias a ello ahora soy lo que soy:
El corazón se rompe, a veces por amor, otras veces por sueños no cumplidos o muchos más motivos…
Los pedazos de nuestro corazón quedan esparcidos por el suelo, roto, destruido y hecho añicos…
Duele, pero podemos agacharnos y recoger los pedazos de nuestro corazón… pegarlos de nuevo, recomenzar y luchar por un mañana mejor, un futuro en el que nuestro corazón encuentre la paz y la felicidad.
No caminemos por la vida escudándonos y evitándonos unos a otros, porque podríamos estar perdiendo la oportunidad de formar una hermosa amistad con quien menos lo esperábamos.
Estemos siempre dispuestas a tender una mano amiga y a dar una oportunidad a las personas con quienes nos encontramos día a día.
Pero puede que ese no sea el problema, y en realidad, aunque duela reconocerlo, el problema resida en nosotras mismas:
Las personas que dan amor siempre reciben amor. No debemos esperar que se nos quiera y aprecie por quienes somos si sólo somos capaces de ver nuestros problemas: Si sin esperar nada a cambio entregamos amor y ayudamos a los demás, sin duda dejaremos de sentir soledad.
El amor es un sentimiento que se construye de forma dedicada, paciente y con mucho esfuerzo. A primera vista no puede darse ninguna de estas condiciones.
A primera vista podemos emocionarnos y sentirnos atraídas, pero el amor va mucho más allá de eso. Eso puede ser parte proceso del enamoramiento, pero amor no es. El amor a primera vista no existe.
Cuando el dolor llega a nuestras vidas, lo hace con sufrimiento, lágrimas, tristeza y fantasmas del pasado…
Quisiéramos no tener que sufrir nunca, pero el dolor es inevitable, es parte de la vida. Y aunque no nos guste, también trae cosas positivas a nuestra vida: oportunidad de cambios, crecimiento y de disfrutar de mayores victorias.
No es bonito que duden de nuestro amor, pero dudar un poquito en momentos puntuales es normal y humano.
A veces las personas necesitamos que se nos reafirme en el amor; sólo supone una pequeña inseguridad, un momento de debilidad y necesidad. Si en lugar de rehuir las preguntas inquisidoras aprovechamos la ocasión para reafirmar nuestro amor, podremos fortalecer nuestra relación demostrando que no hay motivos para dudar del amor que nos sentimos.
Hay hombres con alma de asesinos. Asesinos de nuestros sentimientos, esperanzas e ilusiones. Hieren de muerte nuestros corazones inocentes, atacan nuestra autoestima y nos hacen volubles a su voluntad.
No todos los hombres son así, pero cuando tenemos a uno así en nuestras vidas hay que saber deshacerse de ellos, respetarnos a nosotras mismas y luchar por nuestra libertad y derecho a la felicidad.