Desde tiempos memorables, se ha criticado a la madre soltera
Existen numerosos prejuicios sociales en los que antes de conocer las circunstancias, la mujer ha sido duramente criticada por tener uno o mas hijos sin padre.
“Ven hijo mío, súbete a mis hombros para que puedas ver mas allá, para que la vista te alcance para ver y encontrar tu futuro, ¿Estás cómodo? ¿Has encontrado el futuro que pobremente te pude dar? ¿Podrías ahora relatarme lo que ves? Sólo cuento con tus ojos, los míos se han desgastado en el horizonte que busque para ti”
Ante la urgente necesidad de tomar diversas decisiones en la vida moderna amigas queridas, vemos que cada persona actúa de acuerdo con su escala de valorescada vez se hace más importante identificar las reglas de un hogar, las normas y los valores que favorezcan la convivencia entre las familias y los individuos dentro de una sociedad.
En pocas semanas su mejoría se hizo muy notoria, pues fue cuidada con amor, ternura y dedicación.
Hoy murió una de mis compañeras en edad madura joven, nadie supo que padecía de cáncer por muchos años, ni su propia madre. Su único hijo de 17 años se enteró que estaba en la fase terminal hace dos meses, cuando la internaron.
Estuvo un mes semi-consciente en el hospital, cuando por fin se decidió a hablar sobre su muerte con el hijo. Pero ¿cómo explicarle que tenía que dejarlo solo? ya que nunca contó con su padre ni con nadie de la familia.
Nueve meses de espera, por fin llega el día soñado, tenemos entre los brazos un pedacito de cielo con el que Dios, en su infinita bondad nos premia, algo nuestro, alguien que su vida depende de los cuidados de los padres, pero la espera no termina allí.
Esperamos con ansias sus primeras palabras, sus primeros pasos, hasta esperamos impacientes el momento cuando por fin nos pidan el juguete que ven en una vitrina de exhibición.
En la actualidad de nuestro tiempo, están sucediendo cosas y casos que se salen de los límites
Se están viendo muchas cosas que realmente nos dejan asombradas, preocupadas, angustiadas y muy mortificadas, principalmente a aquellas mujeres que somos madres y que tenemos hijas en plena etapa de la juventud y adolescencia.
Hola mis queridas amigas,
A lo largo del mes y de todo el mundo este mes celebramos a la mujer dedicando un día a la mujer que es madre:
El Día de la Madre.
No podíamos estar ajenas a esta fecha tan importante en la que entregamos reconocimiento y amor a nuestras madres…
Es raro, porque a mi parecer todos los días debieran ser el Día de la Madre…
Muchísimas veces en la vida nos encontramos con parejas que ya no saben qué hacer para que sus relaciones mejoren.
Una historia… una vida:
Nos casamos jóvenes, y tenemos dos hijos… pero nuestra vida se ha vuelto aburrida y llena de reproches, ya no hay caricias ni salidas a cenar, todo se ha vuelto muy rutinario. Mi pareja sólo desea sexo conmigo, y tras obtenerlo se vuelve alejado, lleno de sus actividades.
Se preguntarán el porqué de este título, bien, a través de mi vida, de los altibajos vividos, he llegado a conocer diversidad de seres que están envueltos en sus diferentes problemas, íntimos quizás, pero que se notan en su mirada, en su hablar, en su sonreír cansado, se nota en la manera en que su cuerpo responde al contacto, se nota en esas manos que húmedas se encuentran al tomárselas en un cálido saludo.
Estoy consciente que en estos tiempo vivimos en un constante estrés, la vida misma nos lleva en un continuo vaivén cual remolino constante que nos abraza, muchas veces no sabemos qué rumbo tomar, no sabemos qué actitud tomar, cómo responder ante los sucesos diarios o el futuro mismo.
Hoy quiero escribirles sobre la violencia femenina.
Ese carácter tan fuerte que muchas veces hace infelices a nuestra familia y a nuestro entorno.
Sabemos que muchas veces ese estrés vivido, el circulo tan cerrado en que nos desenvolvemos algunas mujeres, nos hace tener arranques de violencia ante tal o cual situación en el hogar, algún juguete tirado en medio de la sala, la ropa sucia sobre la cama, el armario desarreglado, en fin, hasta la música que escuchan nuestros hijos con volumen alto nos basta para empezar a gritar en medio de regaños y demás.