Las nuevas historias comienzan a escribirse sobre una hoja en blanco, pero resulta extraño comenzar a escribirlas sobre una hoja que no está al principio del cuaderno.
Queremos empezar un nuevo capítulo, pero algunos personajes de capítulos anteriores siguen apareciendo, siguen creyendo o queriendo ser los protagonistas, los villanos, los víctimas, etc.; o simplemente quieren continuar en nuestra historia.
La vida es más complicada de lo que quisiéramos, así pues, muchas veces acabamos perdiendo el control de cosas que consideramos fundamentales para un buen hogar, tales como la unión familiar. Los problemas que enfrentamos nos llevan a problemas de pareja, a veces por cosas inventadas, problemas o simples desacuerdos que finalmente nos llevan a separarnos, con el hombre o la mujer abandonando el hogar, y en consecuencia, también a los hijos.
Con el divorcio no sólo llega el fin de una relación y la solución a un matrimonio roto que sólo se hacía daño el uno al otro… También llega la rabia, la confusión y el dolor por la traición. A veces este sentimiento es tan grande que se llega a desear la muerte del ex, a quien se culpa por haber destruido el hogar, la familia, y esperanzas de una vida satisfactoria.
Entre estas mujeres, es común sufrir el maltrato y abuso psicológico. A esto, hay que añadirles las mentiras e infidelidades… e incluso los consejos de personas que aún siendo bien intencionadas sólo lo hacen peor.
El amor es el sentimiento más hermoso que podemos experimentar las mujeres. Ilusionarse da un nuevo giro a nuestra vida. Los días son más claros, las canciones de amor tienen un significado más profundo y los problemas cotidianos desaparecen.
Pero, ¿qué pasa cuando la persona que queremos decide terminar la relación de pareja que tenemos?Â
No hay consuelo posible, y aunque nos convenzamos de que “él no merecía nuestro amor”, nuestro corazón sigue roto y dolido.
¿Cómo superar a un ex? Es tan difícil como superar la muerte de un ser querido… Aun sabiendo esto, aquí tienes una guía y consejos:
Conforme pasan los años te vas dando cuenta que la vida que llevas no es la que hubieras deseado vivir, sobre todo porque
Pero lo has soportado todo por amor, años en los cuales te perdiste la oportunidad de tener un amor acorde a tu edad. Te perdiste la oportunidad de formar una familia y tener a tus propios hijos, un hogar estable y una pareja de la cual puedas sentirte orgullosa y caminar de su mano por las calles…
Puede haber pasado mucho o poco tiempo desde vuestra ruptura, y ahora te planteas si deberías o no
Él te dice que quiere volver a intentarlo, que te necesita, que le des otra oportunidad…
¿Pero cómo puedes saber si es una buena idea? ¿Y si te equivocas? ¿Y si volvéis a fracasar?
Después de terminar con una relación (por los motivos que sean), conforme van pasando los días te vas sintiendo con la necesidad de escucharle, de volverle a ver…
Te cuestionas una y otra vez el porqué de la ruptura y te vienen los remordimientos, el extrañarle…Â y no importa cuánto daño os habéis hecho, tú sólo quieres volver a verle.
En la actualidad, el incremento de los divorcios en el mundo es moneda corriente. La gente ya no se casa para toda la vida, sino por un rato, hasta que el estrés cotidiano los separe.
Puesto que ahora tenemos la posibilidad de “separarnos” si algo no funciona en el matrimonio, el esfuerzo por congeniar, por amar, por ceder y equilibrar la relación es menor que en otros tiempos…
