Hay quien dice que, si una mujer llega a los 40 años de edad y sigue siendo soltera, es porque no ha sabido amar, que es demasiado exigente, rebelde y no sabe lo que quiere. ¡Tonterías!
Cuando llegan los nietos
Cierto es… que el ser madre es una de la experiencias más maravillosas que hay en esta vida, pero no es menos cierto que cuando los hijos crecen y ves la posibilidad de que un día cercano se vayan de tu lado, el corazón se te pone chiquitico y deseas que tus hijos volvieran a ser los bebés que comían, vestían, e iban donde y cuando tú decías… ¿verdad que es así amiga?
¡Y lo siguiente son los nietos!
La barrera de los 40
Cuando cumplimos los 40 años sentimos que llegamos a la línea que divide la vida de una mujer en todo “lo que fue y lo que será”.
Llegar a los 40 nos da cierto pánico, “que los glaciares del Olvido me arrastren y me pierdan despiadado…” (Jorge Luis Borges).
Pero cada vez hay más mujeres que aprendemos a ser felices con la edad que tenemos.