Conviene aprender a expresar nuestros sentimientos… porque de no hacerlo, las cosas acabarán empeorando. ¿Pero cómo expresarnos con éxito, sin ofender y con buenos resultados?
¿Por qué callamos las mujeres?
Las mujeres callamos, más de lo que debiéramos. Sabemos esperar el momento, pero a veces nunca llega. Nuestra opinión cuenta, si algo hemos de decir, no callemos más. Somos valiosas, tenemos opiniones, usemos nuestro derecho a decir lo que sentimos. Por los hijos, por la familia… y especialmente por nosotras mismas: ¿Por qué callamos las mujeres? Hay que dejar de hacerlo.
¿Te avergüenza expresar amor y cariño?
Tal vez una de las cosas que más nos privamos a nosotros mismos, sea a expresar amor. La mayoría siente un cierto grado de represión frente al hecho de manifestar su amor de forma auténtica y genuina (y por amor me refiero a toda expresión de construcción, halago, reconocimiento y gratitud).
Las palabras positivas animan
Unas pequeñas palabras pueden hacer una gran diferencia en nuestras vidas y las de quienes nos rodean.
Un “me gusta”, un “te amo”, un “qué bien te quedó”, un “cada día te veo mejor” o un simple “gracias” pueden hacer que el día sea mejor.
Intentemos ser conscientes de la importancia de escoger bien las palabras. De expresarnos de forma positiva. Nuestras vidas serían mucho mejor.
Lo que no decimos
Hay muchos “te amo” que quisiéramos habernos atrevido a decir… muchos “te quiero”, “te aprecio”, y “te valoro mucho, amiga”…
Palabras que se quedaron retenidas en nuestro corazón, que por algún motivo no llegamos a decir.
Las cosas hay que decirlas ahora, cuando tenemos la oportunidad, para no lamentar más tarde el no haberlas dicho…
¿Te cuesta expresar tus sentimientos?
Aprender a no callar
No es que debamos “hablar por hablar”, pero sí saber hablar y no callarnos cuando debamos hacerlo.
Paradójicamente pasamos más de la mitad del tiempo hablando de banalidades, cosa que no está mal en pequeñas dosis, pero el problema llega cuando por pronunciar dichas palabras irrisorias, nos olvidamos de pronunciar aquellas bellas palabras que debemos exteriorizar, compartir con los demás y con nuestro espíritu…
¿Cómo controlas tu cólera y tu ira?
¿Cuántas veces sentimos que no podemos controlar nuestros cambios de humor?
¿Cuántas veces nos hemos arrepentido de lo que hemos dicho o hecho al calor de un impulso de cólera?
Saber escuchar con amor…
Siempre que exista una predisposición a escuchar al otro debe hacerse con mucha humildad y estando abiertas al diálogo para crear un buen ambiente que nos invite a conversar sobre nuestras cosas. Nadie quiere ganar batallas: la comprensión y el amor serán siempre los vencedores.
No hay nada más placentero que el ser escuchadas, sobretodo si es tu pareja. Hay muchas cosas que a veces no nos gustan, y a veces el miedo a enfrentarnos y crear una pelea evitamos el tema, pero a la larga nos causa tal frustración que al final es peor.