A veces complicamos demasiado las cosas… pretendemos mucho y metemos mucho ruido en búsqueda de una mejor vida. Tal vez algo de serenidad, calma y tranquilidad podría darnos mayor felicidad.
Es difícil decir si se es más feliz siendo una persona flexible o relajada, pues la felicidad no depende sólo de nuestra capacidad de relajarnos y adaptarnos flexiblemente a la situación… pero desde luego que sí puede influir.